Albóndigas

23/10/2023

Albóndigas Caseras: Una Receta Tradicional para Compartir.

¡Hola a todos! Hoy les traigo una receta que nunca pasa de moda y que ha sido la favorita de muchas familias a lo largo de los años: las albóndigas caseras. Estas pequeñas bolas de carne son una delicia que se puede disfrutar en diferentes platos, ya sea en una sopa, con pasta o simplemente acompañadas de una rica salsa.

Ingredientes.

  • 500 gramos de carne picada (puede ser ternera, cerdo o una mezcla de ambas).
  • Un huevo.
  • 3 dientes de ajo picados finamente.
  • Una cebolla pequeña picada.
  • 100 gramos de pan rallado o miga de pan.
  • Un poco de leche.
  • Sal y pimienta al gusto.
  • Perejil o Cilantro picado (opcional).
  • Aceite de oliva.

Para la salsa.

  • 400 gramos de tomate triturado (Puedes comprar las bolsas ya listas del supermercado).
  • Un diente de ajo.
  • Una cebolla picada.
  • Sal y pimienta.
  • Una pizca de azúcar.
  • Aceite de oliva.
  • Opcional: Si quieres espesar la salsa, puedes disolver maicena (fécula de papa) en agua o utilizar crema de leche.

Preparación.

  1. Preparación de las albóndigas:
    • En un bol grande, combina la carne picada con el ajo, la cebolla, el huevo y el perejil (si decidiste usarlo). Mezcla bien hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
    • En otro recipiente, humedece el pan rallado o las migas de pan con un poco de leche. Deja reposar unos minutos hasta que se suavice. Añade esta mezcla al bol con la carne.
    • Sazona con sal y pimienta al gusto y mezcla nuevamente hasta obtener una masa homogénea.
    • Con las manos húmedas, toma pequeñas porciones de la mezcla y forma bolas del tamaño de una nuez. Reserva.
  2. Cocción de las albóndigas:
    • En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio-alto. Una vez caliente, añade las albóndigas, cuidando de no sobrecargar la sartén.
    • Fríe las albóndigas hasta que estén doradas por todos lados. Una vez listas, retíralas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  3. Preparación de la salsa (si decides hacerla):
    • En la misma sartén, añade un poco más de aceite y sofríe el ajo y la cebolla hasta que estén transparentes.
    • Incorpora el tomate triturado y sazona con sal, pimienta y una pizca de azúcar.
    • Cocina a fuego medio durante unos 20 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que la salsa reduzca y tenga un sabor más concentrado.
    • Vuelve a colocar las albóndigas en la sartén y cocina todo junto durante 10 minutos para que se integren los sabores.

¡Listo! Ahora tienes unas deliciosas albóndigas caseras que puedes disfrutar de muchas maneras. Personalmente, me encanta servirlas con fideos y queso rallado por encima, pero también quedan perfectas con unas papas al horno o simplemente con un trozo de pan fresco para mojar en la salsa.

Te dejo unos consejitos adicionales.

  • Puedes agregar otros ingredientes a las albóndigas, como zanahorias o espinacas picadas, para darles un toque más nutritivo.
  • Para congelar las albóndigas, colócalas en una bandeja separadas y una vez estén congeladas, transfiérelas a una bolsa de congelación. Así podrás tener una comida deliciosa lista en cualquier momento.

Como mencionamos anteriormente, la pasta es un buen acompañamiento, es por eso que cocinarla de forma adecuada es esencial para disfrutarla al máximo. Aquí te presento una guía sencilla para cocer pasta de manera perfecta:

  • Pasta de tu preferencia (spaghetti, penne, fusilli, etc.).
  • Agua.
  • Sal.
  • Aceite de oliva o mantequilla (opcional).

Pasos para preparar la pasta al dente.

  1. Elegir una buena olla: Escoge una olla grande para que la pasta tenga suficiente espacio para moverse mientras se cocina.
  2. Hervir el agua: Llena la olla con abundante agua (una buena regla general es usar al menos 4 litros de agua por cada 500 gramos de pasta). Lleva el agua a ebullición a fuego alto.
  3. Sal: Una vez que el agua esté hirviendo, añade una generosa cantidad de sal. Esto no solo sazona la pasta, sino que también mejora su textura. Como referencia, puedes usar alrededor de 2 cucharadas de sal por cada 4 litros de agua.
  4. Agregar la pasta: Añade la pasta al agua hirviendo y revuelve con una cuchara de madera o espátula para evitar que se pegue.
  5. Tiempo de cocción: Cocina la pasta siguiendo las indicaciones del paquete. El tiempo variará según el tipo y el grosor de la pasta. Sin embargo, es bueno probar un pedazo un minuto o dos antes del tiempo recomendado para asegurarte de obtener la textura "al dente" (tender por fuera y con un pequeño mordisco firme en el centro).
  6. Escurrir: Una vez cocida, vierte la pasta en un colador para escurrir el agua. No enjuagues la pasta con agua fría a menos que estés haciendo una ensalada de pasta fría. El almidón que se libera durante la cocción ayuda a que las salsas se adhieran mejor a la pasta.
  7. Opción del aceite: Algunas personas le ponen un chorrito de aceite o mantequilla luego de escurrir o colar los fideos para humedecerlos y evitar que se peguen.  Recuerda NUNCA usar aceite durante la cocción, ¡no servirá de nada! solo será un gasto, ya que el aceite flotará en el agua al ser de consistencias diferentes.
  8. Servir: Inmediatamente después de escurrir, sirve la pasta en los platos y añade tu salsa favorita.

¡Espero que disfruten de esta receta tanto como yo! No olviden compartir sus experiencias en los comentarios. ¡Buen provecho!

Recetas relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir